INDIGENCIA

El concepto de 'línea de indigencia' procura establecer si los hogares cuentan con ingresos suficientes como para cubrir una canasta de alimentos capaz de satisfacer un umbral mínimo de necesidades. De esta manera, los hogares que no cuentan con ingresos suficientes para adquirir esa canasta son considerados indigentes. Se establece una Canasta Básica de Alimentos (CBA) determinada en función de los hábitos de consumo de la población y de los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos. Una vez establecidos los componentes de la CBA se los valoriza con los precios relevados por un Índice de Precios al Indigente. El valor de la CBA es la Línea de Indigencia.
Así mismo, se puede considerar que las personas cuyos recursos son iguales o inferiores al salario mínimo son indigentes pero en diferente medida. las necesidades que no son satisfechas de forma total y eficiente, son problemas solucionados a medias.
Dado que los requerimientos nutricionales son diferentes según la edad, el sexo y la actividad de las personas, es necesario hacer una adecuación que refleje las características de cada individuo en relación a esas variables. Para esto se toma como unidad de referencia al varón adulto, de 30 a 59 años, con actividad moderada. A esta unidad se la denomina “adulto equivalente” y se le asigna un valor igual a uno. Se calcula la equivalencia con respecto a esa unidad para cada integrante del hogar. Al total familiar obtenido se lo multiplica por el valor de la canasta del adulto equivalente. El valor resultante se compara con el ingreso del hogar, si éste es menor, se dice que se encuentra en una situación de indigencia.
Sin embargo, estas variables resultan muy simples para medir el verdadero impacto que tiene la indigencia y más en estos tiempos en los que la cada vez las condiciones son más difíciles y generan nuevos problemas.





INDIGENCIA A LA TERCERA EDAD
Cada vez que tocamos temas que nos afectan ya sea directamente o indirectamente y que muchas veces nos negamos a reconocer y aceptar, nos damos de que están más ligados a nuestras vidas de lo que nos imaginamos.
Uno de esos temas es la indigencia en la edad, un tema bastante triste que a pesar de que afecta en mayor grado a las personas que han sido la del núcleo familiar, nos toca también a los demás integrantes de la familia ya que en muchas ocasiones hemos sido nosotros los culpables de las tristezas de nuestros abuelos al sentirse ignorados por la sociedad y peor aun por sus mismos familiares.
Con este trabajo queremos despertar la conciencia humana de las personas para hacerles caer en cuenta que la mejor forma de cuidar a nuestros viejos no es aislándolos en cuatro paredes o botándolos a la a su suerte, sino brindándoles mucho amor y sobre todo comprensión porque así como ellos nos tuvieron tanta paciencia cuando éramos niños, ¿por qué no hacerlo con ellos ahora que son viejos?